martes, 2 de junio de 2015

Segundo día.

Como estábamos de vacaciones pensamos en tomárnoslo con calma, no madrugamos mucho y decidimos ir paseando desde el hotel hasta la catedral de Notre-Dame. Es una de las catedrales de estilo gótico más famosas y peculiares ya que sus gárgolas adornan toda su fachada. Al ser martes no tuvimos que hacer tanta cola para entrar y lo que más me impresionó de su interior fue el órgano principal de la catedral.  Volvimos para comer en el hotel ya que nos habían recomendado el menú de ese mismo día y descansamos un rato en nuestras habitaciones. Cuando nos despertamos nos arreglamos para ir a ver el centro de arte contemporáneo de Pompidou. Es un museo de seis plantas de las cuales las que más me gustaron fueron la cuarta y la quinta que acogen las exposiciones permanentes del Museo Nacional de Arte Moderno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario